Cada día que pasa siento que muero un poco más,
mi cuerpo ya no es el mismo
y temo perder el poco erotismo que algún día tuve.
Pero las cosas bonitas son siempre bonitas.
Observo
Infinitas formas de encontrarse.
Ninguna de olvidarte.
Por un instante me hechizaste.
Ahora
sencillamente no me pones.
Agoté las ganas de recordar, el alma es testigo.
Sentada en una piedra te despido.
En silencio.
Me alivia pensar que en mi familia, ninguno murió de amor.